Es sencillo entender este ejemplo. Cuando algunos o
algunas me escriben diciéndome ¿qué me importa a mi si algunas chicas usan
fotos falsas?. Yo les preguntaria “¿Qué les parecería a ellas si en su negocio
en lugar de pagarles con dinero real les dieran monedas falsas?”. Me dirian que
eso es un robo, un timo, un engaño, es delictivo y habria que denunciar a esas
personas... pues eso mismo les contesto yo. Hay que denunciar a quien nos
engaña con fotos falsas robadas y por supuesto dejar de mirar las webs donde se
anuncian al demostrar que dichas webs no sólo no combaten el fraude sino que lo
fomentan al permitir el uso de fotos falsas sin ningún reparo. Probad, los más
valientes, a pagar a esas chicas con una fotocopia de un billete de 50 y veréis
lo que os dicen. Ahora bien, ellas se publicitan con fotos robadas de unas
estupendas modelos y si les decís que no se parece en nada a la de las fotos,
encima quieren tener razón diciendo que sí, que son ellas. Un valiente seguidor
de Vendetta en cierta ocasión se atrevió a imprimir las fotos robadas y las
fotos de la chica real y se las enseñó a la ladrona... ¿Qué pasó? La chica,
pillada en su engaño, tuvo la caradura de arremeter contra la web que publicaba
las fotos aludiendo que era el webmaster el que habia elegido las fotos que le
habia dado la gana sin permiso de la chica. Sabemos que era mentira, pero eso
demuestra una clara colaboración entre la chica y la web y si hay fotos robadas
en una web es porque dicha web lo permite con tal de no perder a sus clientas
que pagan por anunciarse. Algunos amigos me escriben diciéndome que es una
batalla perdida, que hagamos lo que hagamos más del 90% de las fotos son
falsas. Creo que así era antiguamente, pero de un cierto tiempo hasta la fecha
de hoy, ese porcentaje ha variado y ha disminuido. En cierto modo, al temor a
ser pillada robando y ser incluida en la lista negra de ladronas. En vosotros
(los clientes) está que cambien las cosas y que cambie la mentalidad de las
chicas que usan fotos falsas.
Si nos engañan al final serán ellas las
perjudicadas porque dejarán de hacer negocio, las webs con ética dejarán de
anunciarlas y las webs sin ética verán cómo los clientes dejan de mirar sus
webs por su escasa credibilidad. Es una pescadilla que se muerde la cola pero
en nuestra mano está que esto cambie.